Tuesday, December 23, 2008

Sea como sea...

Se llame cómo se llame...

Vayáis dónde vayáis...

....

Un beso a mis compañeros (lo siguen siendo) de hrs...

Espero vernos en enero...

Ah! y gracias por el almuerzo, aunque no me hayáis dejado terminar...
















PD: ¿Por qué ha tenido que aparecer Juan el último día, en el último momento? ¿por qué?





Wednesday, December 03, 2008

Viaje a Valencia, para conocer a los dos nuevos miembros de la familia, Pablo y Carla.

Ruta Roche-Mula-Valencia y a la hora de la cena ya estábamos en casa de Carol y Juanjo. Como era de esperar pedazo de cena que había preparada, y eso que llevábamos dos ''peaso'' pasteles de carne...pues nada, hojaldre por un tubo. Fotos y buena conversación hasta casi las 3 de la mañana.


Al día siguiente, menos mal, Mª Eugenia nos dío un poco más de tregua, y nos dió tiempo a desayunar tranquilamente, ducharnos y ponernos guapos para dar un paseito antes de la paella que nos esperaba.

Por fin conocí el puerto de Valencia. Bueno, en su día estuve allí para coger un crucero (ayys!!) pero no dió tiempo a nada, así que este día, a pesar de la ventolera que había vimos cositas.




Y de allí, al carrer Bonifacio Ferrer. A invadir la casa!
Esta es Carla. Una bebecita muy chiquitita pero que crece por momentos. La reina de los caretos.


La comida no pudo estar mejor...es lo que tiene estar en casa, jejej....los hombres, con los hombres.Vamos! y no están guapos ni ná!!


Y una foto para los posteridad. La gran familia. Y Merce llevaba razón, ¿cómo no iba a estar Carla en la foto? A fin de cuentas, ni se enteró.

Nos pusimos las botas: ensalada, tellinas, olivas, paella, dulces y mucha, mucha bebida, vino, cerveza, orujo, cava, licores...por cierto, ansiosa que espero esa cajita a medias de Rioja que tengo con Jesús.




Y este es Pablo, un crack según palabras textuales de su papi.



Y a catar la noche valenciana una vez más.


No recuerdo dónde cenamos, pero si recuerdo que las croquetas no me gustaron nada.









Y el gran descubrimiento del viaje, el tangram, que por cierto, hay que decir que no se me daba nada mal, excepto el gatito de los collons que se resistió lo suyo.

Y para terminar el fin de semana, parrillada argentina. No se puede pedir más.







PD: espero que la próxima sea en mi casa. Os quiero un huevo....