Wednesday, August 01, 2012


Y, a pesar de tener una lista interminable de tareas y obligaciones, ya que no hace ni 24 horas que ha pasado la tormenta, aunque aun quedan algunas nubes, ha vuelto la tranquilidad...o está llegando.

  Han sido dos meses muy duros.
 
  Hay que seguir una terapia exhaustiva. Sin contemplaciones ni miedos. Sin temer a las consecuencias. Sin pereza. Dura.


Compras.



Comida sin puntos.


TV para no pensar



De vez en cuándo hay que cambiar las rutinas y salirse por la tangente.